Son muchos los deportistas que han incluido la meditación como parte de su rutina de entrenamiento, un ejemplo es Kobe Bryant, leyenda de Los Ángeles Lakers, que reconoció en más de una ocasión que meditaba todas las mañanas. Y no es de extrañar ya que se ha demostrado que la meditación mindfulness provoca cambios neurológicos que mejoran la autorregulación de la atención y promueven estados de ánimo positivos.
Pero, ¿Qué es mindfulness?
Mindfulness es un estado mental que se caracteriza por “prestar atención intencional al momento presente, sin juzgar’’ (Jon Kabat-Zinn,1990) . Es la capacidad de prestar atención al aquí y al ahora, en vez de divagar por nuestros pensamientos sobre el pasado o el futuro.
Muchas veces estamos tan preocupados y distraídos que es habitual comer sin saborear la comida,no nos damos cuenta ni de los olores de nuestro alrededor o no somos ni conscientes de las sensaciones de nuestro cuerpo (hasta que surge dolor o enfermedad).
¿Alguna vez conduciendo o caminando has llegado a un sitio al que no querías ir y no sabes ni cómo? Te has pasado el desvío y tomado otra dirección.⠀
¿O has derramado el vaso sobre la mesa o tirado algo que llevabas en la mano porque se te había olvidado que lo sostenías?⠀
Lo mismo puede ocurrir cuando entrenamos o competimos en nuestro deporte. Podemos llegar a preocuparnos y ‘’distraernos’’ con nuestros pensamientos por el resultado y otras cuestiones, que perdemos el foco de lo realmente importante, el proceso, el aquí y el ahora, el momento presente. Por eso es tan importante entrenar la atención con la actitud adecuada.
El mindfulness, que puede traducirse como conciencia o atención plena, es una técnica que se integra dentro de las intervenciones y terapias de tercera generación. Este nuevo enfoque se caracteriza por adoptar una perspectiva más experiencial, enfatizando la importancia de cambiar la relación con la experiencia interna (sensaciones, cogniciones o emociones) a través de la aceptación, en lugar de pretender eliminarla o cambiarla. (Villalobos, Díaz y Ruiz, 2012).
¿Cómo se practica?
Para meditar es necesario escoger un objeto en el que centrar nuestra atención, normalmente la respiración, pero puede ser las sensaciones del cuerpo, algún sonido o cualquier cosa en la que centrarse. Intentaremos mantener la atención en ese objeto que hemos escogido, por ejemplo la respiración. Obviamente surgirán pensamientos que nos distraerán. Puede ser alguna tarea pendiente que nos viene a la mente, algún juicio sobre la práctica (esto es un rollo, no sirve para nada,etc) ,el recuerdo de algo que nos pasó… El objetivo de la práctica es tomar conciencia de todas esas distracciones, con aceptación, reconociendo que ya están ahí, y con paciencia retomar el control de nuestra atención para volver a focalizarnos en la respiración.
Nuestra mente se verá atraída por el contenido de nuestros pensamientos, por eso es necesaria una actitud abierta de aceptación y paciencia, para ser capaz de soltar esos pensamientos, dejarlos ir y tomar el control de nuestra atención para redirigirla de nuevo a la respiración.
Por supuesto, esta práctica puede trasladarse a nuestro deporte, pudiendo aumentar nuestra capacidad para centrar nuestra atención en lo importante y afrontar las adversidades aceptándolas sin sobrereaccionar.
En resumen, entrenar la atención y la mente a través de la meditación mindfulness te ayudará a ser más consciente de los eventos internos (pensamientos, sentimientos y emociones) y a ser capaz de soltarlos sin ser atrapados por ellos. Igualmente seremos más conscientes de las cosas que nos distraen y tendremos mayor control sobre nuestra atención, pudiendo enfocarnos con más facilidad en aquello que decidamos. Es por eso que Kobe lo usaba cómo una herramienta para aumentar su rendimiento. En palabras del propio Bryant: «la meditación es cómo un ancla…Te sientas y dejas que todos esos pensamientos surjan, tienes la oportunidad de observarte a ti mismo […] Tengo control sobre el día…tengo una calma sobre cualquier cosa que se me presente«.