El venir con las manos vacías es una sensación muy dura y con la impotencia y decepción que genera no haber podido conseguir algo más para España. Es cierto que era un sueño para muchos y ha terminado demasiado pronto.
¿Se prepara al jugador para estas situaciones? ¿Habíamos trabajado que esto podía pasar? ¿Nos enseñan a perder?
Yo os diré que desde mi experiencia no, que el apoyo y el trabajo se enfoca por desgracia siempre al éxito y hablar de lo que no queremos que ocurra a veces es cierto que no es positivo pero según cuando y cómo, es necesario.
Cuando hablamos de algo que mueve tanto y que se va ha hablar hasta la saciedad, ya no por el impacto mediático que ante esto creo que el jugador si que tiene más herramientas, pero si sobre las expectativas que había sobre ellos como colectivos. Más de uno se sentirá que ha fallado, que no ha hecho todo lo que podía, que no se merece estar donde está….
La decepción siempre ocurre tras esperar algo concreto y depositar ilusión en ello y cuando esa expectativa no sucede o sí que sucede, pero de diferente forma, todo se tambalea si no hay una buena base de prevención.
Voy a dejar algunos de los pasos que considero claves en la recomposición de nuestra selección y de sus jugadores:
- Es necesario poder diferenciar los aspectos que dependen de uno mismo y los que no, y centrarse y trabajar en los primeros.
- Identificar y canalizar las emociones. Es normal sentir tristeza, rabia y frustración, pero cada uno debe aprender a encauzar dichas emociones.
- Puede ser de utilidad hablar sobre lo vivido con alguien de confianza que ayude a contrastar y relativizar la situación.
- Hay que soltar de las emociones que no nos dejen avanzar, para no caer en el rencor y el resentimiento prolongado en el tiempo.
- Volver a confiar y a a generar nuevas oportunidades que te enfoque a intentarlo de nuevo.
Muchos anhelaran lo que hubo, otros pensarán en lo que podrá haber, y así es la vida. Valorar lo que tenemos cuando lo tenemos, aprovechar las oportunidades cuando llegan y quedarte satisfecho por saber que has dado todo lo que podías dar en esta ocasión.
Ahora es un duelo que no solo los jugadores deben pasar, también todos los que esperaban algo que no ha llegado. Pasar página, prepararse de nuevo y construir algo en base a lo que hemos aprendido.