Aquí comienza un nuevo apartado lleno de experiencias que he ido realizando con mucho cariño.
He tenido la oportunidad de hablar con grandes deportistas sobre sus trayectorias deportivas y así poder compartirlas con vosotros a través de mi web. Aquí os dejo un adelanto.
Empecé jugando a Fútbol Sala en el equipo de mi colegio (Padre Enrique de Ossó), posteriormente pasé al C.D Oliver (fútbol 11), club en el que estuve una temporada hasta que fiché por las categorías inferiores del Real Zaragoza.
En esos momentos no me planteaba ser futbolista profesional, simplemente jugaba al fútbol para divertirme, si que es cierto que cuando empecé a jugar en categorías mas avanzadas del Real Zaragoza ya tenía el deseo de convertirme en futbolista profesional.
Supuso algo muy bonito e ilusionante, tener como oficio lo que más te gusta es una maravilla.
En los últimos 4 años he vivido cosas muy importantes, como yo soy una persona positiva, me gusta quedarme sobre todo con lo bueno. Lo describiría como una experiencia de superación y constancia que me hace estar muy orgulloso de mí mismo y a la vez me motiva a seguir levantándome con mucha energía todas las mañanas.
Ser capitán para mí es una mezcla de dos sentimientos; por un lado el orgullo de poder liderar a un equipo y por otro la responsabilidad que eso conlleva.
Considero que al llevarlo con mucha prudencia, humildad y honestidad me ayudó a disfrutarlo más y a saber gestionarlo.
Soy de los que piensan que la presión es la que uno se quiere poner, creo que la presión no ayuda, lo que si que puede ayudar es esa tensión competitiva previa que siempre hay que tener independientemente del club en el que milites.
Hay muchas maneras, pero sin duda la que yo elegí y considero la más lógica que es la de la naturalidad. Si eres quién realmente quieres ser no tienes por qué tener miedo a nada ni a nadie, eso sí, hay que entrar con mucho respeto.
Está claro que a ningún deportista nos gusta tener lesiones, yo creo que poniendo de nuestra parte para evitarlas y afrontándolas como parte del deporte, cuando llegan ya tenemos mucho camino avanzado.
Hay que afrontarlas con la idea de que cada día que pasa es un día menos para volver a los terrenos de juego y aunque muchas veces sea complicado intentar aprender y disfrutar también de esa experiencia centrándonos en lo que depende de nosotros.
Sobre todo los valores de la” Humildad” y del “Trabajo” que mis padres me han inculcado desde pequeñito.
Supone una alegría tremenda después de tanto trabajo que llevas realizando hasta llegar a conseguirlo y una satisfacción tremenda por todos los compañeros, cuerpo técnico y todas esas personas que muchas veces están “en la sombra” pero que hacen un trabajo impagable y que a los deportistas nos ayudan y nos facilitan mucho las cosas.
En este caso diría que el método y la disciplina, yo creo que se puede llegar a compaginar ambas sin que suponga un estrés añadido.
Que piensen bien como quieren enfocar su vida a medio y largo plazo ya que la vida profesional del deportista en la mayoría de los casos es de unos 15 años. Esto no es permanente.
Vivir el presente, disfrutar de todo y mantener una constancia.
Sinceramente antes no le daba tanta importancia, pero cada día que pasa estoy dándome cuenta de que es fundamental para tener éxito y sobre todo (independientemente del éxito) para ser feliz.
No puedo darle un porcentaje concreto porque para mí la psicología influye en todos los aspectos, digamos que no es el 100% porque hay más aspectos pero la psicología esta ya inmersa en cada uno de ellos.
Por supuesto. Sobre todo en la infancia pero también en el día a día, al final los deportistas somos personas como todo el mundo.
De mis padres agradezco que se marcasen el objetivo de que tenía que seguir estudiando independientemente del fútbol y después de los partidos no me decían lo que hacía bien y lo que hacía mal, simplemente lo comentábamos por encima pero las cuestiones más profundas se las dejaban a los entrenadores, que para eso están y así es como tiene que ser.
Opino que lo importante a esas edades es que el niño disfrute de lo que está haciendo y sobre todo aprenda a la vez que crece de manera saludable.
Sobre todo ser yo mismo, habiendo mejorado y aprendido en muchos aspectos porque siempre hay margen de mejora.
Muchas cosas pero por destacar una, el compañerismo y el remar todos en la misma dirección.
A los chicos que lean mi entrevista decirles que disfruten al máximo siendo responsables y que pongan todo de su parte para lograr sus objetivos y si llegan a lograrlos genial. Si no lo consiguen que no se sientan fracasados porque el que da todo lo que tiene ya habrá triunfado en la vida.
¿Qué valor tiene para ti el haber llevado el brazalete de la sub-21?
Es una mezcla de sentimiento; responsabilidad y orgullo. Lo he asumido siempre con naturalidad ya que me ha permitido aprender en todas las ocasiones que he tenido la oportunidad de ser capitán. (En la Selección Aragonesa y también en el Real Zaragoza). Es un compromiso que me ha hecho siempre crecer.
Intentar dar mi mejor versión y superarme día a día.
Muchas gracias Jesús por compartir con nosotros tu experiencia. ¡Te deseamos mucha suerte!