El foco mediático y la atención de todos encima
Ningún futbolista quiere vivir en el centro de la polémica, ni ser protagonista por algo que no tenga que ver con su trabajo dentro del campo. Es inevitable que esto acabe afectando en el rendimiento cuando eres noticia cada semana, por mucho trabajo que se haga, lo que hay que intentar es que afecte lo menos posible.
Muchos se plantean si esto en el fondo a Vinicius le gusta, pero al final no deja de ser algo que le está interrumpiendo y que le está quitando energía para dedicarle a otras cosas. Otros reflexionan sobre si es algo que pasa a menudo y en todos los campos, algo tendrá que ver Vinicius en todo ello.
La realidad es que la presión psicológica a la que se está enfrentando Vinicius en cada partido le puede incluso llegar a mermar, hasta el punto de que se pueda replantear su continuidad en un futuro no muy lejano, por la incomodidad que le estará suponiendo enfrentarse a estas situaciones, y por mucho que lo trate de ocultar.
Cómo puede gestionar los nervios dentro del campo
El problema llega cuando lo que vemos en el campo no es fruto del juego, sino de una premeditación previa por parte de los rivales de provocarlo, con intención de desestabilizarle tanto a él como al equipo aunque sea de rebote.
Cuando algo así que no depende del futbolista, como es el comportamiento de los demás, es fácil que se pueda sentir frustrado, por ello si no se tienen suficientes habilidades para gestionarlo, es importante trabajar la parte psicológica con un profesional para que pueda fortalecerse ante la dificultad.
Está siendo preso de provocaciones constantes y eso le hace perder los papeles, acabando con comportamientos inapropiados. En estos casos, para mantenerse fuerte ante las ofensas, se ha de trabajar con especial atención el auto control, pues cuando se acaban perdiendo las formas, pierden toda la razón que tienen sobre lo ocurrido. Si
Otro aspecto importante a controlar es la ansiedad anticipatoria, si ya se prepara antes de que llegue, para repetir escenarios desagradables, sin querer estará aumentando la activación con la que va a competir, quedando más vulnerable a una reacción desproporcionada tras la provocación en cuestión.
El entorno y el vestuario
El equipo es normal que responda que con total protección, si ven que uno de lo suyos se le está señalado con esta insistencia, tratarán de apoyarlo. Tampoco es cómodo para el equipo que se acaba viendo inmerso en una problemática que les distrae, desgasta y desenfoca del objetivo principal que es la liga.
Creo que al final el ambiente que se está generando no favorece a nadie; empezando por vinicius y acabando por el público o la prensa, que más que ver un partido de fútbol vemos un programa del corazón, ya que el foco se desvía por completo de lo que de verdad importa, el deporte en sí y la competición.
Creo que el compromiso de cómo podemos transformar estos contextos, es de todos. Hoy es Vinicius el foco, mañana será otro, pero todo esto ¿Por qué pasa?